El punto de partida para la puesta en marcha de la venta de un inmueble es la valoración inmobiliaria o el precio de mercado, para ello utilizamos diferentes herramientas que, nos permite, hacer una pre-valoración ajustada, a partir de la dirección del inmueble y la referencia catastral. No por ello, es necesario, la visita «in situ» para poder concretar y poder incidir en otros aspectos ajenos, que pueden influir de forma positiva en la valoración (si el inmueble dispone de terraza, de zonas comunes, si se ha realizado una reforma, si tiene posibilidad de parking o trastero, si la escalera está reformada…) o al contrario puede repercutir de forma negativa en otros aspectos (finca de origen, sin reformar, sin ascensor, sin terraza, cuando existe ocupación vecinal…). Todo ello y nuestra experiencia en la zona, nos permite, ser precisos en el precio.